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La Terapia Psicoconductual (TPC) se ha convertido en la orientación terapéutica con mayor evidencia empírica y experimental en las últimas décadas. Esta disciplina psicológica se enfoca en los pensamientos, sentimientos y comportamientos del individuo, así como en cómo estos se relacionan entre sí. La TPC es un enfoque terapéutico efectivo para ayudar a los individuas a tratar remediar y prevenir problemas de salud mental, que pueden incluir desde trastornos de ansiedad hasta problemas de abuso de sustancias.
En este artículo se revisan tres de las estrategias terapéuticas más usadas hoy en día: restructuración cognitiva, defusión cognitiva y mindfulness, ofreciendo al lector una aproximación alternativa a la terapia psicoconductual. Se ofrece una explicación detallada de los conceptos principales de la terapia cognitiva conductual, así como una guía paso a paso de cómo aplicarla. También se incluye una lista de recursos útiles para aquellos interesados en profundizar su conocimiento acerca de la terapia psicoconductual.
¿Qué es la telapia psicoconducutal?
La terapia psicoconductual (TPC) se basa en teorías enfocadas en el control de los pensamientos, sentimientos y acciones del individuo, características que a menudo se encuentran en el origen de muchos trastornos mentales. Comprende una variedad de enfoques terapéuticos que buscan ayudar al paciente a comprender las relaciones entre los pensamientos, sentimientos y acciones, y al mismo tiempo aprender a controlar sus comportamientos. En este sentido, se establece un vínculo entre la psicología y la conducta.
Los fundamentos de la Terapia Psicoconductual (TPC) se encuentran en el comportamiento clásico de Pavlov y el aprendizaje conductual de Skinner. Estos dos enfoques se basan en la concepción de que los seres humanos son productos de la “caja de herramientas” de la experiencia y, en última instancia, son productos de lo que les ha pasado. Esto significa que nuestros comportamientos hoy en día están determinados por lo que nos ha sucedido y hemos aprendido en el pasado. Los fundamentos de la terapia psicoconductual se centran en el estudio de cómo la gente puede aprender nuevos comportamientos, así como cambiar los comportamientos que encontraron inadecuados.
Restructuración Cognitiva
La restructuración cognitiva es una estrategia psicológica importante dentro de la terapia psicoconductual. Esta se basa en la idea de que nuestros comportamientos y emociones están guiados por nuestros pensamientos y creencias. Esta estrategia se centra en ayudar a los individuos a identificar y reestructurar pensamientos irracionales y errados que están detrás de los comportamientos o emociones desadaptativas. El objetivo de la restructuración cognitiva es ayudar al individuo a llegar a conclusiones realistas e identificar patrones de pensamiento y creencias disfuncionales.
Los terapeutas psicoconductuales usan la restructuración cognitiva para desarrollar pensamientos más positivos, usando el diálogo interno y las interconexiones entre los pensamientos, los sentimientos y los comportamientos. Estas son algunas de las técnicas usadas en la restructuración cognitiva:
- Reestructuración lógica.
- Reescritura de lenguaje.
- Detección de sesgos cognitivos.
- Control de sucesos.
- Autoepítetos negativos.
Defusión Cognitiva
La defusión cognitiva es una estrategia psicológica usada para reducir el estrés relacionado con los pensamientos y los sentimientos. Esta herramienta terapéutica usa técnicas cognitivas para ayudar al paciente a desarrollar una relación más saludable con sus pensamientos. Al hacerlo, se incrementa el sentido de control y la capacidad del individuo de observar sus pensamientos y comportamientos sin juzgarse.
La defusión cognitiva busca ayudar al paciente a desarrollar mayor consciencia acerca de sus emociones y respuestas. Esto ayudará al paciente a tomar mejores decisiones, así como ser más flexibles en relación a sus pensamientos y sentimientos. Algunas de las herramientas de defusión cognitiva incluyen ejercicios de respiración, observación de los pensamientos desde la perspectiva de un tercero, así como el uso de analogías para ayudar al individuo a ver sus pensamientos y sentimientos desde otra perspectiva.
Mindfulness
La terapia psicoconductual también incluye mindfulness, un enfoque terapéutico basado en la consciencia y la atención plena. Esta herramienta terapéutica busca ayudar al paciente a enfrentarse a cualquier situación que pueda causar malestar o estrés, desarrollando la capacidad de reconocer sus sentimientos sin tratar de resistirlos o controlarlos. Practicar mindfulness puede ayudar al paciente a ver más claramente su situación actual, así como aprender a reconocer y aceptar los sentimientos y pensamientos sin juzgar.
Ejercicios de mindfulness se pueden usar para ayudar al paciente a mantenerse centrado y consciente de sus pensamientos y sentimientos. Estos ejercicios incluyen el cultivo de la atención plena, la atención dirigida, el reconocimiento de su pensamiento y la aceptación de los sentimientos. También se usan técnicas como la meditación, el estiramiento y la respiración profunda para ayudar al paciente a centrarse y a vivir el momento presente.
Cómo Aplicar La Terapia Psicoconductual
La terapia psicoconductual se realiza generalmente en sesiones de terapia individual, aunque en algunos casos, se pude usar para tratar a varias personas (terapia de grupo). Esta ter
